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En nuestra web
usted
recibe exactamente
la piel que escoge,
salvo
alfombras por encargo.
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Todas las pieles provienen de animales sacrificados para el
consumo de carne.
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Nuestras alfombras de piel están
severamente seleccionadas.
Han superado tres controles de calidad: en matadero, en fábrica
y en tienda.
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La
mayor parte de la
piel de vacuno que
vendemos
tiene un
calibre de
2-2'5
mm, mayor
grosor que
el mayoritario ofrecido en el mercado.
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Son
pieles flexibles, ligeras y totalmente planas.
Tienen una
gran
durabilidad.
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El corte del perímetro de las
pieles
naturales es redondeado,
lo que dificulta que
las puntas
se levanten.
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Ofrecemos pieles con
una superficie de
hasta
4-4,5 m²,
un tamaño notablemente mayor
que
la media del mercado.
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Las alfombras
fabricadas en
España, la mayoría que ofrecemos,
tienen garantía de un año que cubre posibles
deficiencias del
curtido.
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El proceso de fabricación
cumple
con las estrictas normativas europeas de respeto al medio ambiente.
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Además la
curtiduría y el taller de confección, empresa familiar fundada
en 1970, con la que trabajamos casi desde sus inicios, genera
trabajo en nuestro entorno.